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Términos más que comunes: cláusulas abusivas

DividendosPor desgracia, los últimos años nos han dejado en los medios muchos términos a los que no habíamos estado acostumbrados con anterioridad. Prima de riesgo, cláusula suelo, cláusulas abusivas.

Todas ellas entraron de repente por las pantallas de nuestras casas como consecuencia de las situaciones económicas tanto globales como familiares, como forma de explicar muchos de los actos que, aunque legales en su momento, ni siquiera eran tenidos en cuenta a la hora de firmar.

Durante los años de bonanza del sector inmobiliario, fueron muchas las entidades que se beneficiarion de las promociones y de los préstamos hipotecarios de los compradores, que iban a notaría casi por orden de fila. Levante, la Costa del Sol, las capitales, todo el territorio vio cómo las grúas iban haciendo huecos en los que inaugurar nuevas promociones.

Las ventas nunca fueron mejores, las hipotecas firmadas, sin embargo, no siempre fueron lo justas que debieran. De hecho, cuando llegó el momento de la crisis es cuando se empezó a hablar de la corrupción, de las letras pequeñas y muchos fueron los que tuvieron que defenderse con abogados de cláusulas abusivas en Valencia o en el resto de CCAA.

Sin duda, los bancos durante mucho tiempo estuvieron jugando con la ambigüedad y con el desconocimiento. Cuando todo iba bien, nadie se fijó en estos detalles. Sin embargo, al llegar el momento del frenazo económico, cuando los tipos de interés empezaron a bajar y las hipotecas comenzaron su viaje hacia mínimos históricos en términos de Euribor, muchos fueron los que se dieron cuenta del error cometido el día de la escrituración, cuando firmaron la hipoteca con el banco con las llamadas cláusulas suelo y que impedirían que su hipoteca bajara en consecuencia a la realidad económica.

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De hecho, muchos han sido los que han tratado de anular las cláusulas abusivas a las que se vieron obligados a sucumbir en un origen. Sin embargo, también es verdad que con abogados expertos y con las últimas sentencias del Alto Tribunal, no está todo perdido.

Las condenas ya han empezado a salir de los tribunales, condenando a bancos a anular dichas condiciones, permitiendo que muchos se beneficien de la reducción de cuotas y sentando un precedente jurídico  que servirá, también a nivel internacional, para acotar ciertas prácticas que estaban extendidas en el sector bancario.