MADRID, 06 (SERVIMEDIA)
La Fiscalía de Barcelona se opone a la puesta en libertad del jugador de fútbol Dani Alves, que se encuentra en prisión provisional mientas se investiga su presunta agresión sexual a una mujer el pasado mes de diciembre en la discoteca Sutton de Barcelona. El Ministerio Público responde así a la petición realizada por su defensa, que pidió su libertad ofreciendo a cambio medidas cautelares como la colocación de una pulsera de control telemática o comparecencias diarias.
Según la Fiscalía, siguen existiendo «indicios racionales» de que el futbolista cometió la presunta violación y persiste el riesgo de fuga. Entiende la Fiscalía que las «medidas alternativas a la prisión propuestas por la defensa» no son suficientes para garantizar que el deportista hace frente a sus obligaciones con la justicia.
De ese modo, el Ministerio Público rechaza la posibilidad de que Alves salga de prisión si entrega el pasaporte, se compromete a comparecer ante el juzgado periódicamente y a portar un control telemático.
Ahora deberá presentar sus alegaciones la defensa de la víctima, tras lo cual será la Sección Tercera de la Audiencia de Barcelona la que decida si mantiene al futbolista en prisión provisional o si lo pone en libertad.
Según el auto de prisión, hay «indicios más que suficientes» para considerar que se pudo producir una agresión sexual. Además, la jueza indicó que la gravedad de la pena a la que se enfrenta el investigado, la capacidad económica de Alves y la falta de arraigo en España hacen que el riesgo de fuga sea alto en este caso. La magistrada tuvo también en cuenta las contradicciones del deportista, que dio tres versiones diferentes de lo sucedido en sus primeras declaraciones.
Por su parte, Cristóbal Martell, abogado del futbolista, defiende que este caso ha hecho descender notablemente los ingresos del jugador, que ha visto rescindidos varios de sus contratos publicitarios y de patrocinio y su ficha con el equipo mexicano con el que jugaba, al tiempo que asegura su intención de quedarse a vivir en Barcelona.
Alves sigue defendiendo su inocencia. La jueza del caso ya ha tomado declaración a las dos amigas que acompañaban a la víctima el día en que se produjo la presunta agresión sexual. Fuentes jurídicas explican que ambas dijeron que habían sido también objeto de tocamientos no consentidos. De hecho, a una de ellas se le ofreció la posibilidad de denunciar, pero la mujer la rechazó con el argumento de que lo importante es dilucidar la agresión a su amiga.
