MADRID, 22 (SERVIMEDIA)
El Pleno del Congreso de los Diputados aprobó este jueves con 195 votos a favor, 95 abstenciones y 53 votos en contra la suspensión de las reglas fiscales para 2023, lo que permitirá al Gobierno elaborar los Presupuestos Generales del Estado del próximo ejercicio sobre el límite de gasto no financiero o ‘techo de gasto’ que aprobó en julio de 198.221 millones de euros, récord histórico.
La medida sigue la recomendación de la Comisión Europea de activar la cláusula de escape del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que libera a los Estados miembro de la obligación de cumplir con los objetivos de déficit y permite un mayor gasto público con el que hacer frente a las circunstancias derivadas de la guerra en Ucrania.
El artículo 135 de la Constitución Española y 11.3 de la Ley de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera, permite la activación de esta cláusula de escape con la que suspender las reglas fiscales en situaciones de emergencia.
Durante su intervención en el Pleno, la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, defendió que la suspensión de los límites de déficit y deuda pública no son un «cheque en blanco», sino el «inicio de un camino que será bueno que recorramos juntos para que al final las cuentas estén mejoradas».
Argumentó que si en los últimos dos ejercicios se «priorizó» la lucha contra la covid, «cuando apenas estábamos saliendo de esas consecuencias» se presenta una guerra por la invasión de Ucrania por parte de la Rusia de Putin y que ha traído en los últimos días «noticias inquietantes por parte del dirigente soviético». Para Montero, son situaciones «sobrevenidas» que «no dependen» de los Gobierno, pero es una «responsabilidad cómo se responde ante esos problemas».
La ministra apuntó que el obstruccionismo «puede ser una estrategia electoral pero no es un proyecto del país» y apeló a los diputados del PP al indicar que «saben que esta propuesta es necesaria». «Sería un buen signo de unanimidad que nos dirigiéramos a los ciudadanos con la idea de que tras cada una de las cifras hay una idea de que España puede ser más fuerte o puede estar más cohesionada», apuntó.
El objetivo del límite de gasto aprobado, subrayó Montero, es «consolidar crecimiento económico y la creación de empleo», mantener «el esfuerzo de inversión muy intensificado con el Plan de Recuperación garantizando el desarrollo de políticas que son claves para nuestro país» y «proteger a la clase media y trabajadora, al sector productivo y a las clases vulnerables de una situación que se deriva del precio de la energía».
Montero aseveró que el presupuesto se va a presentar «en tiempo y forma» incorporando el gasto estructural «con independencia de las medidas necesarias que sean necesario prorrogar por motivo de la guerra de Ucrania» y apuntó que, cuando se vaya acercando la fecha de su finalización, se irá analizando «cuáles son necesarias prorrogar o si hay que aprobar nuevas medidas».
Por otro lado, apuntó que el hecho de que las reglas fiscales se encuentren «en suspenso» no significa que el Gobierno «renuncie a la responsabilidad fiscal» y subrayó que durante «cuatro trimestres consecutivos» se ha rebajado la deuda pública y el déficit se redujo del 10,3% al 6,9% entre 2020 y 2021. El objetivo para 2022 es finalizar el ejercicio con un 5% de déficit.
Además, subrayó que la suspensión de las reglas fiscales sustituye los objetivos de estabilidad presupuestaria para comunidades autónomas y ayuntamientos para que las administraciones «tengan un marco sobre el que elaborar sus cuentas públicas». Así, detalló que la reducción del déficit va a «recaer» sobre la administración central, cuyo gasto se va a estrechar del 3,8% al 3,2%, mientras que en comunidades va a pasar del 0,1% al 0,3% y en los ayuntamientos estará en un superávit del 0,1%. Para la Seguridad Social, la tasa de referencia se situará en un 0,5%.
OPOSICIÓN
Por el PP, Elvira Rodríguez anunció la abstención de su grupo parlamentario y criticó que el Gobierno «no cumple» en referencia a la falta de un plan de reequilibrio presupuestario. Con esta votación, Rodríguez indicó que da pie al Ejecutivo «para que eludan todas las normas fiscales que permiten la sostenibilidad a medio y largo plazo de las cuentas públicas».
La diputada del PSOE Montse Mínguez criticó que la abstención del PP «es un no» ya que el Congreso debía dar una mayoría absoluta para apreciar las circunstancias extraordinarias que permiten la suspensión de las reglas fiscales y que en la oposición «exigen cumplimientos» de deuda y déficit que no llevaban a cabo cuando estaban en el Gobierno.
Por su parte, Iván Espinosa de los Monteros (VOX) indicó que su formación votaría en contra ya que no quieren ser «corresponsable» de este «cheque en blanco» que supone un «un constante gasto público bochornoso y el fracaso de los objetivos que justificarían la suspensión de las reglas fiscales».
Txema Guijarro de Unidas Podemos subrayó sobre esta suspensión que habría que «empezar a reconocer» que «estos protocolos heredados de la vieja arquitectura de la crisis de 2008 hace tiempo que dejaron de servir si es que alguna vez lo hicieron» y apuntó que la subida del techo de gasto en 2.000 millones es «una clara contención en términos reales dado el contexto inflacionario en el que nos encontramos».
ERC anunció su voto positivo a través del diputado Joan Margall, quien señaló que «ahora más que nunca» es «necesario que las administraciones dispongan de todas las herramientas a su alcance para hacer frente a la crisis». Asimismo, pidió derogar el artículo 135 de la Constitución «que prioriza el pago de la deuda» y «valentía» para realizar «una reforma fiscal profunda».
Por Ciudadanos, María Muñoz anunció que votarían a favor «porque así lo marca Europa» y «no podemos oponernos a este acuerdo», aunque apuntó que «la excepcionalidad no se puede convertir en algo estructural».
Entre los grupos exconvergentes, Miriam Nogueras (Junts) señaló que lo relevante es «dónde, cómo y a quién» se va invertir ese dinero y apuntó que «en Cataluña seguro que no», mientras que Ferran Bel (PDeCat) aseveró que su grupo «entiende que se dan las circunstancias extraordinarias» para votar favorablemente.
La diputada del PNV Idoia Sagastizabal anunció su voto favorable para permitir al Gobierno «un marco mucho más real para presentar presupuestos y herramientas a su alcance para paliar las consecuencias la guerra de Putin» y pidió derogar la ley de Estabilidad Presupuestaria.
Por Bildu, Mertxe Aizpurua señaló que el debate se produce en un «contexto de crisis profunda» generada por «un sistema dirigido por las élites» y confirmó su voto a favor de que las reglas ficales «continúen en suspenso».