MADRID, 22 (SERVIMEDIA)
El Gobierno tachó hoy de «inmoral» la disputa que perciben entre las comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular para ver «quién se lleva a los más ricos» con las bajadas de impuestos como el de patrimonio.
«No compartimos una política fiscal que regale beneficios a los que más tienen y, sin embargo, no sea capaz de afrontar que los poderosos contribuyan a las familias que más lo necesitan», reprochó la ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez.
Así respondió a su llegada a unas jornadas sobre conciliación organizadas por el Club de Malasmadres cuando se le preguntó por las últimas decisiones en materia fiscal de gobiernos regiones con dirigentes del PP al frente.
Rodríguez insistió en que no comparten la intención del presidente de la Junta de Andalucía, el popular Juanma Moreno, de eliminar el impuesto de patrimonio y comentó que le parece todavía «mucho más inmoral» ver a los presidentes autonómicos del PP «pelearse por ver quién se lleva a los más ricos». «No, se trata de ver cómo ayudamos a los que más necesitan», defendió, tras conocer la intención del presidente de Murcia, Fernando López Miras, de realizar una deflación del IRPF.
«Algo tendrá que decir el líder del PP», espetó la portavoz, porque «la política fiscal debería ser una política de Estado». «Para ponerse de acuerdo los dos grandes partidos, tendrá que empezar por poner de acuerdo los suyos», señaló Rodríguez.
Por otra parte, sobre la intención del Ejecutivo de poner en marcha un gravamen temporal a las grandes fortunas, la portavoz del Gobierno afirmó que se están «estudiando fórmulas» y justificó el rechazo de los socialistas a una demanda histórica de Podemos hasta ahora porque «en un año» han «cambiado muchas circunstancias».
Tras citar la guerra en Ucrania y sus derivadas con una «importante afectación a las economías familiares», la portavoz recordó las medidas paliativas impulsadas por el Ejecutivo por un total de 30.000 millones. «Todo eso hay que sufragarlo», admitió la portavoz y, por eso, » tienen que arrimar los que más tienen».