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¿Cómo beneficia un SAP en las pymes?

Estamos en la era de los datos. Negar esa evidencia es cerrar los ojos a una realidad que, gracias precisamente a las nuevas aplicaciones de la tecnología en la vida diaria de las empresas, está consiguiendo nuevas formas de entender la operatividad y, sobre todo, el concepto de empresa global.

Una de esas herramientas básicas que hoy en día se necesitan en cualquier ámbito, incluido en despachos de abogados donde las causas pueden tener ciertos detalles de distintas áreas del derecho es el llamado SAP para pymes.

Este tipo de software es capaz de procesar los datos de las funciones que se desarrollan de forma interna y plantearlas y aglutinarlas en una única plataforma, lo que hace que los distintos departamentos o áreas jurídicas puedan comunicarse entre sí fácilmente. «Es claro el éxito que está teniendo este tipo de solución al fomentar la comunicación y el intercambio de datos que de verdad son relevantes dentro de la organización. Siempre se ha dicho que la información es poder. Pero estamos un paso por delante de ese enunciado gracias a la tecnología: ahora la información se analiza desde distintas perspectivas» explican.

¿Qué beneficios puede tener el SAP en un bufete o despacho de abogados?

Como en toda organización, el uso de un ERP es clave para mejorar los procesos internos y sacar partido a las posibilidades del mercado. Pero, en el caso del SAP, es aún más evidente su utilidad cuando se trata del mundo jurídico.

Gracias a esta forma de tratar la información y datos, se puede organizar, por ejemplo, la información de los clientes y sus diferentes áreas de trabajo desde el punto de vista jurídico (civil, administrativo, penal, etc.). Cuando cada área trabaja su parte en un caso, que suele ser global, puede volcar sus informaciones de forma que otra de las áreas pueda beneficiarse de esos enfoques, datos e incluso encontrar la clave para sus defensas.

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A esto se suma la capacidad de conocer, en todo momento y desde cualquier área, cómo van las cuentas y facturación, cuáles hay que empezar a gestionar para su cobro. De esta forma, la parte financiera corporativa está también aglutinada y clarificada en todo momento.

Otra utilidad clave tiene que ver con la comunicación con los clientes. Poder registrar, en todo momento, por qué se contacta, cuándo ha sido y que toda la organización pueda tener claro cuál es el diálogo con la firma puede ser de gran interés para las defensas y evitar repetir u obviar algunas cosas.

El trabajo de fidelización de clientes es clave y se basa, precisamente, en eso, en hacerles sentir parte de la organización y arropados por toda la estructura empresarial.

En caso de tener que gestionar facturas por desplazamientos, viajes, gastos de representación para un caso concreto, el sistema SAP es clave para organizarlo y tener en todo momento controladas las facturas y su correcta inclusión en cuentas.

Sin duda, apostar por la digitalización, automatización y, sobre todo, por las posibilidades de aplicar el big data en procesos diarios es el camino a seguir para mejorar la competitividad, el trabajo grupal y las sinergias propias de cualquier organización.