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Barbón apoya una reforma de la ley del ‘solo sí es sí’ porque hay «problemas» en su aplicación

MADRID, 30 (SERVIMEDIA)

El presidente de Asturias, el socialista Adrián Barbón, apoyó este lunes una reforma de la conocida como ley del ‘solo sí es sí’ tras «reconocer que desde el punto de vista de legislación final generó disfunciones y problemas».

«Me parece bien que se reforme», sostuvo el presidente asturiano en un acto que organizó Europa Press, en el que destacó el «objeto» de la ley de garantía integral de la libertad sexual cuya aplicación está derivando en la rebaja en las penas a condenados por agresión sexual. «Que se reforme lo veo bien y creo que coincidimos todos en ello», respondió.

Barbón reconoció que «hay una base fundamental de coincidencia plena» en la gestión del Ejecutivo pero lamentó episodios como el de esta norma y que, señaló, afecta a la coalición en su conjunto aunque sea una norma que impulsó el Ministerio de Igualdad, en manos de Unidas Podemos.

El también líder de los socialistas asturianos remarcó que «el Gobierno es uno, más allá de lo que algunos quieran exteriorizar», en referencia a las distancias que marcan desde Unidas Podemos en algunos momentos y que, a su juicio, son «estrategias de partido» que «muchas veces explican la debilidad de partidos de la izquierda del PSOE».

En esta línea, reiteró que para el ciudadano «el Gobierno es uno» y «la mayor debilidad» que puede presentar «es la sensación de enfrentamiento», en un momento en el que el Ministerio de Justicia y el de Igualdad chocan en la fórmula para atajar la sangría de las rebajas de penas de los condenados.

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«Los ministros socialistas nunca hacen ninguna declaración fuera de lugar, extemporáneas ni atacando a la otra parte del Gobierno de coalición», defendió Barbón, porque «si el Gobierno de coalición quiere ser útil», «se equivocan» desde la parte de Unidas Podemos por hacer hace declaraciones fuera que deberían ser opiniones a presentar dentro de la coalición.

CONTRA SILENCIO PP

Además de este asunto, Barbón también se refirió a cuestiones de igualdad para reivindicar que su comunidad «siempre» ha estado a la vanguardia en esta lucha. «Es una bandera que nos negamos a arriar» y, en estos días en los que Vox propone «un protocolo del aborto similar al que han planteado» y duda de «si se debatió en el Gobierno de Castilla y León, se producen silencios clamorosos, como es el PP en el caso de Asturias».

En esta línea, aclaró que «no se puede dar ni un paso atrás en la defensa de los derechos de las mujeres» y que la «Igualdad no tiene precio». «Ni por muchas ganas que tengas de gobernar, ni porque sea a costa -acceder a ese Gobierno- de limitar derechos y libertades», remarcó en mensaje directo al Partido Popular.

Por otra parte, el presidente de Asturias admitió sus diferencias y que no comparte la reforma del delito de malversación realizada. Y reconoció que igual que sobre la sedición compartió la reforma, «después de estudiar el tema y la legislación comparada», no así con la malversación. «Yo no soy delegado del Gobierno, sino presidente del Principado de Asturias», remarcó el también secretario general de la Federación Socialista Asturiana.

Pese a marcar algunas distancias, el presidente asturiano reconoció la gestión del Ejecutivo que lidera Pedro Sánchez y aseguró que mantiene «muy buena relación» con el presidente y secretario general del PSOE, al que ve «seguro, convencido» y «trabajando en la dinámica de superación de la crisis», «muy volcado en la gestión internacional».

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Por otra parte, sobre el líder del Partido Popular, reconoció la «buena relación» que mantiene con los que son o han sido presidentes de las comunidades limítrofes. Así destacó que cuando era presidente de la Xunta de Galicia, con Feijoó trabajó en el reto demográfico y la financiación.

Pero que ahora el «Alberto nacional nos sorprende mucho» y sostuvo que «el PP no ha entendido el cambio de oposición» y tener que practicar una «oposición constructiva», hasta el punto de que «da la sensación de que no hay un PP, sino dos». En este sentido, atacó que a un «PP radicalizado en el no» y criticó que «no se puede dudar de la legitimidad electoral del que gana».

El presidente de Asturias, que estuvo arropado, entre otros, por las vicepresidentas primera y tercera del Gobierno, Nadia Calviño y Teresa Ribera, citó también a la titular de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, a la hora de recordar la necesaria reforma del sistema de financiación autonómica.

En este sentido, reconoció que cada comunidad reclamará lo que sea más beneficioso para su territorio, por lo que recomendó al Ejecutivo que, cuando vaya a acometer este debate, prepare «espaldas de faquir», ante una modificación del sistema que «urgente e inaplazable».