El fraude de las emisiones ya tiene imputación para la casa Volkswagen. Ha sido un juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, quien ha llevado a cabo esta acción a la vista de las investigaciones que se han llevado a cabo para ver las implicaciones de la casa matriz alemana en este caso.
Esta imputación, que ya ha sido comunicada a Alemania, hará que la compañía tenga que nombrar representante en España para los próximos juicios que tendrán lugar en la Audiencia española y que buscarán las explicaciones para imponer las sanciones oportunas ante el escándalo que saltó hace unos meses.
Estafa, fraude en subvenciones y delitos contra el medioambiente son los cargos por haber trucado los motores de los vehículos diesel de 4 cilindros para que dieran menos emisiones en las pruebas. ¿Cómo se realizó? Pues teniendo en cuenta que hoy en día gran parte del funcionamiento de los vehículos está vinculado a la tecnología y electrónica, se busca demostrar que se instaló un software que falseaba las mediciones.
La novedad de la imputación viene, precisamente, por tratar de depurar responsabilidades a la empresa alemana haciéndola subsidiaria de todo lo que ha ocurrido en otros mercados y, en concreto, en el mercado español. Se asume que la marca debe responder a lo que se impone desde ella en la fabricación de los vehículos y, en este caso, puesto que se trataba de la venta de vehículos de baja emisión contaminante, cuando era falso, acarrea consecuencias mucho más allá de las medioambientales como muestran los cargos imputados.
Queda ahora por ver cuál será el desenlace de un juicio que traerá cola y podrá sentar precedentes e inspirarse en otros procesos en los que la marca alemana se está viendo involucrada en otros países. HAbrá que ver finalmente cuál será la sanción y si tendrán que indemnizar, como se decía, a los usuarios que apostaron por este tipo de vehículo.
